“Conócete a ti mismo” es una de las frases más famosas y, también, de las más difíciles de conseguir. ¿realmente crees que te conoces? Nuestra personalidad se va formando de acuerdo a la sociedad que nos rodea, a nuestra familia, a nuestros amigos, y a nuestra propia adaptación a todo ello.
Conocerte a ti mismo, todo un arte
Cuando ya alcanzas cierta edad, comienzas a darte cuenta de que tu personalidad en gran parte se ha formado. Uno de los puntos básicos para ello es saber que tienes cuatro puntos a tratar: tus deseos, tus miedos, tus metas y por supuesto, tus rencores.
Dentro de tus deseos, se mezcla todo aquello que tiene que ver con el amor, la seducción, y tu pareja. En este nivel no todo es sexo y juguetes para adultos, dentro de los deseos también se tiene en cuenta lo que quieres para tu familia y amigos.
Tus metas son todos tus objetivos tanto a corto como a largo plazo. Tus miedos y rencores, son la parte en la que realmente debes trabajar. Esto no es tan fácil como parece. La mayoría de los seres humanos escondemos los miedos y rencores bajo máscaras de diversos tipos, una de ellas, quizá la más peligrosa, son las adicciones.
Manejar tus adicciones
¿Sabías que las adicciones no son solo las drogas y el alcohol? Las conductas que se vuelven exclusivas y excluyentes pueden ser consideradas adicciones. Una de las adicciones más comunes y poco tratadas es la adicción al dulce. Este genera a largo plazo una gran cantidad de molestias en la salud, diabetes y sobrepeso entre las principales.
También hay adicciones al sexo, al juego, al tabaco, las anfetaminas, antidepresivos, nicotina, videojuegos, tecnología, redes sociales, e incluso al ejercicio, y aunque ésta parezca muy saludable, también es una adicción difícil de manejar.
Si te sientes identificado con alguna de estas patologías, puedes ir a la clínica de adicciones en Tijuana, en donde existe todo un programa adecuado para que este tipo de situaciones puedan ser superadas.
Por supuesto, no es un camino fácil, pero, en cada uno de estos casos existe un tratamiento que se puede llevar a efecto, para superarla.
Conocerte a ti mismo no es nada fácil, es un camino lleno de situaciones que pueden ser tan sorprendentes como molestas, por lo que en esta dirección te puede ayudar un psicólogo.
En muchos casos, los psicólogos te pueden ayudar a descubrir rasgos de tu personalidad que ni siquiera sabías que tenías. En cuanto puedas identificar este problema ¡puedes comenzar a tratarlo!
No existen personas perfectas. Existen personalidades más carismáticas y atractivas, un punto que realmente sí se puede lograr. Los seres humanos tenemos una capacidad excepcional: la posibilidad de adaptarnos de forma rápida, a diversas situaciones. Es por ello que hemos logrado sobrevivir durante siglos, a pesar de que nuestro cuerpo no cuenta con las defensas que otras criaturas sí, como pelaje, garras, colmillos, etc.
Inteligencia y adaptabilidad, dos puntos que sin duda te ayudarán a conocerte a ti mismo y a quienes te rodean.